Esta quizá es la carta más difícil que escribí hasta ahora, sale
desde una parte de mi corazón que desconozco por completo y que hace
unos días comienza a sorprenderme por la fuerza con la que invade mi
ser y la velocidad con la que hace crecer un sentimiento invisible pero
real que hace que mi mente se centre en tus palabras escritas y
sinceras como si desde hace mucho os conociera,
palabras que por alguna razón llegan a mi alma poderosas dejando
huella que enloquece mis sueños y alborotan mis sentidos llevándome
indefensa a un lugar en el que nunca he estado y que gracias a vosotras
comienzo a conocer mi vida.
Pienso
en vosotras, en la única imagen que me da la mente,la única imagen que
puedo mantener grabada en mi alma porque ya la llevo ahí, sin proponérmelo, sin buscarlo, como si hubiese estado ahí todo el tiempo escondida, esperando
que llegue el momento para mostrarse ante mi tan poderosa y tan clara
hasta el punto de intimidarme y sacarme del camino que recorro a diario
para llevarme a un mundo nuevo y maravilloso que se ilumina con vuestras
frases y que me hace sentir feliz, diferente, como alguien más,alguien
que comienza de cero, sin dudas y sin prejuicios.
Es fácil
equivocarse y siempre existe el miedo ante el riesgo, más aún cuando el
corazón ha tenido que superar varias duras pruebas que lo han hecho
desconfiado y duro .Pero sin importar esto camino a su lado
hipnotizada y me dejo llevar de su mano en éste juego de alegrías y
tristezas con la esperanza de no fallar.
No
se cuando podré tocaros, aún veo lejano ese día, espero que cuando
llegue y la luz de la realidad a veces infame ilumine nuestros rostros,
el sortilegio esté completo y las piezas embonen con perfección para
crear un complemento, un todo, que encierre en un marco infinito el
sentimiento que esta noche llevo dentro y que me hace feliz.
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